El australiano Josh Brookes continuará en el British Superbike.

Fiel a su costumbre de anunciar tarde sus planes, el espectacular piloto será la punta de lanza del proyecto del McAMS Yamaha para 2018, repitiendo con la R1, con la que obtuvo el título en 2015.

Tras su paso por el WorldSBK, el australiano regresó la pasada temporada, con Yamaha en el equipo Anvil Hire, manteniendo sus opciones de título hasta la última carrera, quedándose a tan solo tres puntos del ganador del Campeonato, Shane Byrne.

Su compañero de equipo será Tarran McKenzie, otro de los hijos del histórico Niall.