Román Ramos comenzó su andadura en el Campeonato del Mundo de Superbike 2017 logrando puntuar en las dos mangas, fiel a su habitual regularidad en sus dos temporadas precedentes.

El piloto del Team Go Eleven no tuvo un fin de semana facil, llegando al inicio de temporada con muy pocas jornadas de test.

En la Superpole logró la 17ª plaza en la parrilla de salida, y en la primera manga logró terminar en 13ª posición después de batallar con otra Kawasaki privada, la de Alex de Angelis.

En la segunda optó por permanecer a cola del grupo que luchaba por la 11ª posición, detrás de De Angelis, Bradl, Reiterberger y Brookes.

El de Santa María de Cayón lanzó un fuerte ataque al final de la prueba, pero la larga recta de Phillip Island no perdona, logrando la 14ª plaza al término de la carrera.

Román Ramos: “El fin de semana no ha ido del todo bien, pienso que podíamos haber estado mas cerca y ser mas fuertes. En la primera carrera, en las primeras vuetlas, la moto de Brookes perdía líquido y tuve que pasarlo. No tenía mucha confianza en apretar y perdí contacto con el grupo de delante. Luché con De Angelis y pude pasarlo al final.
En la segunda me quedé detrás del grupo para conservar el neumático, y a falta de cuatro vueltas ataqué superando a varios de ellos, pero me adelantaron en la recta, sobre la línea. El equipo ha trabajado muy duro para hacer una moto competitiva, y pienso que podemos serlos y llegar al top-10.”